La reapertura de bares sería bajo particulares condiciones
Los pedidos de habilitación en el sector gastronómico por parte del gobernador provincial hacia el Jefe de Gabinete de la Nación, incrementaron las expectativas del sector, que auguran una posible reapertura para el próximo lunes.
Como principales medidas de prevención, los clientes que asistan a bares y restaurantes deberán dejar sus datos personales para poder ingresar. Además, se buscará mantener el distanciamiento social, por lo que se reducirá un 50 por ciento la capacidad de los locales.
El objetivo de mantener el registro de los comensales, radicaría en que, llegado el caso, pueda mantenerse un contacto con las personas que estuvieron en el lugar si se detectara una persona contagiada: “Sabemos que puede ser algo molesto, pero la intención es poder rastrear a las personas en el caso de que ocurra un contagio”, afirmaron referentes del sector.
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La intención de los propietarios es que de a poco las medidas de bioseguridad vayan naturalizándose y que la clientela termine por acostumbrarse a ellos.
A fin de cumplir con las garantías de protección, los locales exigirán a sus empleados que utilicen barbijos y máscaras durante todo el tiempo que permanezcan en sus trabajos.
Con una baja tasa de contagios de COVID-19 en Rosario, desde la Asociación Hotelera Gastronómica estiman que en los próximos días podría hacerse efectiva la apertura del sector, que llevaría algún alivio luego de casi dos meses sin actividad.
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