Ladrón tiraba adoquines para robarle a los autos y una de las víctimas lo mató a tiros
Un ladrón fue abatido a balazos luego de que junto a algunos cómplices tiraran adoquines en la autopista Rosario-Córdoba para asaltar a los automovilistas. Una de las víctimas se defendió tras el ataque del agresor y lo mató. La Justicia determinó que actuó en "legítima defensa".
El hecho ocurrió en la noche del miércoles a la altura del Puente Wilde y a 300 metros de la avenida de Circunvalación.
Según informaron fuentes policiales a los medios locales, el delincuente abatido fue identificado como Axel Eric Sebastián Giles, de 19 años.
Giles y su banda arrojaban adoquines a la cinta asfáltica y lograron que estallara el neumático de un Peugeot 308, tras lo cual abordaron al conductor del auto, un hombre residente de la localidad bonaerense de Moreno, y le robaron pertenencias.
Detrás del vehículo asaltado paró para auxiliar a la víctima una camioneta Hilux y los ladrones también asaltaron a sus ocupantes, pero en un momento uno de los sospechosos comenzó a efectuar disparos que impactaron en el rodado más grande donde iban un hombre, su pareja, su suegro y dos menores de 4 y 11 años.
El conductor de la camionera resultó herido en la pierna derecha y su suegro reaccionó tomando una pistola y baleando al ladrón, tras lo cual los ocupantes de este vehículo se dirigieron hacia un hospital de la ciudad de Arroyo Seco donde el herido recibió asistencia médica, para luego ser trasladado a un sanatorio privado de Rosario.
Más tarde, las víctimas entregaron a la Policía de Santa Fe la pistola calibre 9 milímetros y el vehículo para que realicen las pericias de rigor, mientras que en la jornada del jueves el hombre que disparó y mató al delincuente fue imputado, pero no por homicidio según la investigación, actuó en "legítima defensa" y quedó en libertad.
La audiencia judicial se realizó en la sede de la Fiscalía Regional local y fuentes de Fiscalía informaron que "se imputó la calificación legal de portación de arma de fuego atenuada", es decir, por el uso de la pistola, pero teniendo la autorización legal para llevarla. En tanto, en conjunto con la defensa del hombre, se acordaron "reglas de conducta" para que continúe ligado al proceso y acuda cuando sea requerido, pero sin perder su libertad.
"En relación al hecho de homicidio no se formuló imputación al respecto por los fundamentos expuestos por el fiscal, de que se trata de un hecho encuadrado en legítima defensa", expresaron los voceros.
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