Puerto San Martín celebró 136 años de historia y compromiso social
La fiesta aniversario reunió a la comunidad en una celebración que destacó historia local, producción y proyectos futuros.
Puerto San Martín celebró sus 136 años con un acto que reunió memoria histórica, identidad local y una mirada hacia el futuro.
En el Teatro Municipal, vecinos, trabajadores, docentes y autoridades compartieron una jornada que combinó emoción, homenajes y reflexiones sobre el desarrollo de una ciudad atravesada por la industria.
Durante la ceremonia, el intendente Carlos De Grandis evocó la transformación del antiguo pueblo portuario en un núcleo industrial estratégico, recordando que “en el pueblo nos conocíamos todos, no había maldad, la política no dividía”.
También subrayó los desafíos cotidianos de la vida en una zona industrial, señalando que “en esta ciudad industrial no es fácil vivir” y que esas dificultades requieren que cada recurso “vuelva a los vecinos” en forma de obras, servicios y espacios públicos.
Vecinos de distintas generaciones expresaron el orgullo por el crecimiento urbano y cultural, destacando espacios como el Puerto de las Infancias, los CDI y las nuevas infraestructuras municipales.
El acto también puso en valor las identidades que sostienen la vida comunitaria. La marcha de Punta Quebracho, interpretada con la presencia de su compositor, volvió a funcionar como símbolo de pertenencia y continuidad histórica. Empleados municipales fueron reconocidos por sus 25 años de servicio, y docentes de los CDI resaltaron el rol de la primera infancia como base de un proyecto educativo que crece con la ciudad.
De Grandis remarcó los planes estratégicos para los próximos años, entre ellos el parque fotovoltaico que busca convertir a Puerto en un municipio autosuficiente en energía, afirmando que “queremos ser el primer municipio del país que se autoabastezca” y que “si generamos acá lo que consumimos, esos millones quedan en Puerto San Martín”.
También defendió la histórica tasa a los camiones con una referencia directa al espíritu local: “Vamos a defender esa tasa con el mismo ímpetu. No pasarán”. Con una fuerte apelación al sentido de pertenencia, cerró el acto con una arenga que sintetizó el espíritu del aniversario: “Puerto tiene destino. Puerto tiene rumbo. Puerto tiene futuro”.