Buenos resultados en el debut del equipo especial contra fiestas clandestinas
El equipo especial conformado por la Fiscalía que investiga delitos relacionados al COVID-19, la secretaría de Control municipal y la policía de la Unidad Regional II, debutó este fin de semana desbaratando tres fiestas clandestinas, en las que detuvo a 85 personas, y clausuró un bar y dos locales comerciales que violaron el protocolo.
Su objetivo principal radicaría en facilitar las tareas de control en el marco de la pandemia, ya que las dependencias municipales, como la Secretaría de Control no permitían sancionar correctamente a los incumplidores al no poder hacer detenciones.
En el primer fin de semana en funciones, el equipo desbarató, el viernes por la noche, una fiesta ilegal en un domicilio particular de Dorrego al 2400, donde se procedió a 14 detenciones. Asimismo, debieron intervenir en el bar Perro Negro, ubicado en Mendoza al 1600, donde se detectó que había 12 clientes a las 4.40 de la mañana.
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En tanto, el día sábado, en Santa Fe al 3100, se arrestaron 16 personas, la mayoría estudiantes brasileños de la Facultad de Medicina de la UNR. A su vez, alrededor de las 4.50, se desarmó una fiesta electrónica que tuvo lugar en una vivienda de Buenos Aires al 4300, con 43 detenidos. Por otra parte, se clausuró una hamburguesería de Pichincha por no respetar la cantidad máxima de clientes e inhabilitaron un sauna en Echesortu.
Todas las detenciones fueron ordenadas por el fiscal Gustavo Ponce Asahad, a cargo de la Unidad Especial de delitos relacionados con el coronavirus. A las personas bajo arresto se les formará causa por incumplimiento del aislamiento sanitario dispuesto por el gobierno nacional. Por el municipio participó personal de la GUM y Control Urbano.
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