Prisión domiciliaria para empleados del Correo por supuesto contrabando
El juez federal Eduardo Rodrígues da Cruz dispuso que tres empleados del Correo Argentino de Rosario continúen el proceso judicial en prisión domiciliaria. Están acusados de recibir dinero para que importaciones ingresaran al país sin pasar por controles aduaneros ni tributos oficiales.
La investigación de la fiscal federal Soledad García señaló que los acusados “idearon un sistema paralelo a los mecanismos establecidos legalmente”. Según la hipótesis, las encomiendas eran desviadas desde el depósito de Monte Grande para ser entregadas directamente a los destinatarios a cambio de un 50 por ciento de los impuestos que correspondían en el circuito formal.
Los involucrados son el jubilado Hugo L., exencargado de la sección de encomiendas internacionales; Eduardo C., jefe del Nodo Rosario; y su pareja, Maia L., quien habria coordinado cobros y entregas. Un cuarto imputado, Juan A., llegó tarde a la audiencia y el magistrado definirá en otra instancia si queda en libertad.
El delito imputado es contrabando agravado por la participación de empleados públicos, el monto superior a tres millones de pesos y la intervención de más de tres personas. La causa también involucra a particulares que recibían los productos, entre ellos un importador de Arroyo Seco que había adquirido mercadería valuada en 155 mil dólares.
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