Imputaron al jefe de la barra de Newell’s por extorsionar e intimidar al presidente del club
Leandro “Pollo” Vinardi, uno de los jefes de la barra brava de Newell’s, fue imputado este jueves por su participación en una serie de extorsiones e intimidaciones contra el presidente del club, Ignacio Astore. La Justicia lo señaló como instigador de un ataque a piedrazos contra el Hospital Privado Rosario (HPR), donde trabaja el dirigente, y de un grafiti amenazante pintado en el lugar.
Conflicto con la dirigencia y el trasfondo violento
El enfrentamiento entre la barra brava y la comisión directiva de Newell’s comenzó en 2022, luego de que la dirigencia decidiera suspender los pagos habituales a los violentos tras la derrota contra Godoy Cruz el 27 de agosto. Hasta ese momento, según la investigación, la barra recibía 500 mil pesos por partido.
El 12 de noviembre de ese año, en medio de crecientes tensiones, el HPR sufrió un ataque a piedrazos, acompañado por un mensaje intimidante dirigido a Astore: “Dr. Astore, no traicione. Te metemos balas.”
El fiscal Luis Schiappa Pietra acusó a Vinardi, quien se encuentra detenido en la cárcel de Ezeiza, de ser coautor de tentativa de extorsión e instigador de daño. El juez Hernán Postma confirmó la imputación y también acusó a Emir Rodríguez, hijastro de Vinardi, por portación ilegal de arma de fuego y abuso de armas en relación con una balacera ocurrida en Villa Gobernador Gálvez.
El rol de Los Monos y la interna de la barra
Según la Justicia, la barra de Newell’s opera bajo el mando de Máximo Ariel “Guille” Cantero, líder de Los Monos. Dentro de esa estructura, Vinardi cumplía el rol de gerente de una asociación ilícita, organizando extorsiones y disputas territoriales.
La causa también expuso el trasfondo de los enfrentamientos internos en la barra, donde distintas facciones pelean por el control del paravalanchas y de los negocios ilegales vinculados al club.
Astore, en su declaración, reveló que la situación con la barra se deterioró cuando la dirigencia prohibió el uso del estadio cubierto para fiestas electrónicas organizadas por los violentos. También relató un episodio en el que Lucho Gallardo, otro referente de la barra, lo obligó a hablar con Vinardi por teléfono: “Esa apretada no me la olvido más. Me pasó el teléfono, no pude negarme.”
Según el presidente de Newell’s, Vinardi le exigió dinero, camisetas y el estadio para eventos, dejándolo bajo presión para negociar con Gallardo.
Con las nuevas imputaciones, el entramado violento que rodea a la barra de Newell’s y su vínculo con el crimen organizado sigue quedando expuesto ante la Justicia.
La noticia Imputaron al jefe de la barra de Newell’s por extorsionar e intimidar al presidente del club se publicó primero en Sin Mordaza.